BEGUINAS

BEGUINAS

MARIA CRISTINA INOGES SANZ

21,00 €
IVA incluido
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Editorial:
CESMA - SM
Año de edición:
2021
Materia
Espiritual
ISBN:
978-84-288-3768-2
Páginas:
256
Encuadernación:
Rústica
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Pro´logo, de Mari´a Luisa Berzosa, fi, y Caterina Ciriello, fiOctubre de 1997  Parte primera La Edad Media. Aproximacio´n            La sociedadLos monasterios, la Iglesia y los obisposLa mi´sticaEl amor corte´sLa mujerAlgunos movimientos medievales La mujer religiosa en la Edad MediaLa precursoraEl movimiento de las beguinas¿Fueron sinodales las beguinas? Las beguinas            Algunas beguinas poco conocidas                        La beguina beata Mari´a d'Oignies, la primera                        La beguina Odilia de Lieja, la madre de JohnLa beguina Ida de Nivelles, la compasivaLa beguina Juetta de Huy, la que no penso´ serlo                        La beguina Douceline de Hye`res, la Grande Dame                        La beguina Agnes de Viena, la terciaria capuchina             Mi´stica, espiritualidad, lenguaje y compasio´n en las beguinas Algunas beguinas ma´s conocidas e inco´modas            Hadewijch de Amberes            Beatriz de Nazaret            Matilde Magdeburgo            Margarita Porete            Juliana de Norwich           De beguinas a brujas: el imaginario popular manipulado Las beguinas en Espan~a y su influenciaZaragozaTeruelOtros lugaresIsabel de Villena, la que predicabaJuana de la cruz, Jesucristo se encarna en carne de mujerIsabel de la Cruz, la heterodoxa  Teresa de Jesu´s            Teresa y Marti´n            ¿Influyeron las beguinas en Teresa de Jesu´s?  Parte segunda Beguinas del siglo xxEsther -Etty- Hillesum: la vida es bella a pesar de todoDorothy Day, la sierva de Dios y de los hombresSimone Weil: amar a Dios ausente, como en el amor corte´s ¿Realmente murio´ en 2013 la u´ltima beguina? ¿Tendri´an sentido hoy las beguinas?  Epi´logoEnheduanna (2354 a. c.)Bibliografi´a

Las beguinas fueron mi´sticas absolutamente originales, capaces de desarrollar un pensamiento teolo´gico ine´dito, cuyo centro es el alma que busca a Dios a trave´s de un incesante dia´logo amoroso, dirigido simplemente a sen~alar el proceso que siguen todos aquellos que emprenden un camino espiritual, «porque Dios Amor no exige nada para darlo todo, y que lo mejor para el alma es aniquilarse en Dios». No eran bien vistas por dos motivos: en primer lugar, se las consideraba un peligro, porque intelectualmente eran superiores a gran parte de la poblacio´n y del propio clero; y tambie´n porque se dedicaban al cuidado de la gente ma´s desfavorecida sin pedir nada a cambio; eran humildes y sencillas. Esto despertaba un sentimiento de miedo y rechazo en la sociedad medieval del momento, que estaba marcada por el cambio radical de la Iglesia, que habi´a evolucionado desde la defensa de la ayuda al pro´jimo hasta la Iglesia perseguidora de infieles y herejes, que se sustentaba en el poder de la Inquisicio´n -y de la poca cultura de la gente-.